Si bien necesitaba este país la lluvia como agua de mayo... parece que el agua de septiembre es bastante más traicionera. Todos sabemos de las desgracias que están sucediendo por todas las provincias en las que las lluvias han sido torrenciales por las noticias, por lo que no vamos a decir nada nuevo a cerca de ello, sólo mostrar nuestras condolencias a todos los que han sufrido y todavía sufren los estragos de las lluvias. Nuestras condolencias también a las víctimas mortales y sentimiento para con sus familiares. También con quienes lo han perdido todo... o casi, sea vivienda, sea empresa o lugar de trabajo y posiblemente trabajo.

Este es el caso de Pedro Gil, uno de los creadores de La Marca del Este. Este héroe, hijo de la maltrecha Lorca, ha sufrido los estragos de la lluvia. Ha perdido la empresa familiar y todo lo que allí guardaba como oro en paño, incluido el stock de Tesoros de la Marca del Este. Como es natural, está destrozado y abatido. Sólo piensa en cómo salir adelante para dar de comer a su familia, que no es poco. Nada más tenéis que ver su blog para comprender lo que os digo.

Es emotivo ver como los seguidores de la web y de La Marca les dan ánimos y proponen cosas como el crowdfunding, los donativos y varias cosas más. El caso es que Holocubierta, la editorial vinculada a La Marca del Este, está estudiando distintas opciones para ayudar a Pedro. Desde aquí estaremos atentos a cualquier propuesta dispuestos a difundirla y a colaborar, pues es en estos momentos en los que aquellos que nos hacen soñar necesitan de nosotros para que sigamos soñando con sus sueños.

Un abrazo enorme a Pedro, a la Marca del Este y a todos sus seguidores. Que la Marca resurja de sus húmedas cenizas. Por ti, por mi, la Marca del ESte no debe morir.