Hoy se cumple la mayoría de edad de tan aciago día para Carlos Moreno e, indirectamente, para todos nosotros, los jugadores de rol. Hoy hace 18 años que se cometió un asesinato atroz por parte de un asesino sin piedad y un secuaz sin cerebro, y al mismo tiempo se gestaba desde materias grises atrofiadas por sus ansias Torquemadescas de quemar, arrasar, destruir, hacer rodar cabezas a lo Robespierre, meter en campos de concentración cual nazis, a todo aquel que, indefectiblemente, no es como ellos: sensacionalistas, amigos del morbo, embusteros, zainos, apologetas del odio, la estupidez y la soplapoyez... o simplificando en una sola palabra, parafraseando al padrastro del lazarillo de tormes, unos verdaderos "hideputa"s.

Canales de televisión como Tele5, "periodistas" como Rafael Torres, gentuza que en vez de informar (informándose previamente) desinformaron con alevosía, nos tacharon entre otras cosas como satánicos, filonazis, racistas... [sarcasmo on]Afamados "pichicólogos" (digo, periodistas) como el citado Rafael Torres [/sarcasmo off] dicen, y cito: " los juegos de rol provocan necrosis fulminantes en los tejidos de la cabeza y del corazón. Ideados para imbéciles profundos, o bien para volver profundamente imbécil al que todavía no lo es".

Triste es que incluso años después, ciertos programas como el de Libertad Digital de 21/03/2008 que, en contra de lo que dice el propio asesino, sigue diciendo, en boca de su presentador, que jugaba a un juego de rol llamado "Razas", creado por el mismo sujeto. Javier Rosado dijo que sólo jugó una vez al rol y que despreciaba esos tipos de juego porque dejaban al azar de los dados las acciones. Que el suyo era un juego perfecto que nada tenía que ver con nuestros juegos.

Fue un día triste, por lo que le pasó a Carlos Moreno y lo que ha sufrido su familia. Por ello como rolero, desde esta página les doy mi más profundo pésame, no sólo por el asesinato de su esposo y padre, sino también porque en marzo de 2008 le dieron a ese psicópata el tercer grado. Es por ello que pondremos un crespón en honor a Carlos Moreno, a su familia y a todos aquellos que han sido estigmatizados por los medios de comunicación, aquellos que han sufrido insultos, desprecios y vejaciones simplemente por jugar al rol. Hoy cumplimos 18 años, hoy se cumple la mayoría de edad de nuestra "condena" por un delito que no cometimos. Hoy gritamos con orgullo: SOMOS ROLEROS, quitándonos definitivamente las argollas de la condena social. El crimen de Javier Rosado, el crimen mal llamado "crimen del rol" debemos llamarlo y le llamaremos "el crimen de Razas", pues ese fue su "juego".